Esta semana me encontré con muchas personas que paseaban solos, nunca había analizado esto, incluso jamás me había tomado el tiempo de ver lo que sucedía alrededor de mi. Probablemente es una de las cosas más comunes, tengo muchas amigas que les gusta pasar tiempo a solas pero… y si la razón es para escapar de ti mismo?
Todos los seres humanos hemos sentido soledad en algún momento de nuestra vida y déjame decirte que es completamente normal… No hay que confundir la “soledad” con el temor a estar “solos”… A qué voy con esto: la soledad es estar con uno mismo, encontrarse, reflexionar sobre los actos, la rutina o incluso sobre las cosas que hemos estado haciendo mal como personas.
Hay muchas personas que por miedo a esta soledad, se pasan la vida haciendo cosas, aunque sea solos pero únicamente para mantener sus mentes lejos de ellos mismos. Pero ¿por qué esta necesidad de huir de nosotros mismos? Estar solos implica una gran responsabilidad empezando por la razón: estar con nosotros mismos nos hace conocernos mejor, saber lo que te gusta, lo que no te gusta.
El otro día escuché decir a alguien que las personas que se la pasan teniendo actividades, mucho trabajo, muchas cosas que hacer es porque en el fondo no encuentran agradable darse cuenta de las carencias en sus vidas… Por ejemplo: una persona de más de cuarenta que aun está soltera pero que se la pasa trabajando, nunca tiene tiempo para ver a sus amigos, viaja mucho, siempre por cuestiones laborales y huye de su vida social, es una persona que al final quieren mantener su vida lejos de la idea de que está solo a su edad.
Pero no todo es malo, incluso vivir en pareja no garantiza la felicidad, por esa razón no debemos caer en una rutina tediosa ni acostumbrarnos a algo que no nos gusta porque con esta actitud corremos el riesgo de quedarnos solos.
Hay que recordar que para estar bien con otra persona, primero debemos estar bien con nosotros mismos porque sólo de esa manera sabremos si hemos elegido o bien, elegir a la persona correcta, a aquella persona que a pesar de su rutina sepa estar contigo y con tus defectos, virtudes, pasiones, habilidades y darse cuenta que a veces también necesitamos tiempo para estar en nuestra soledad para reflexionar.
Así que si la vida te da la oportunidad de hacer las cosas bien, no huyas de ti! Cada día tiene un nuevo inicio, en ti está darle un gran significado a cada cosa que haces.
Hasta la próxima,
Lucy!