Estaba leyendo en una página de internet algo que decía «las 10 cosas que puedes tirar» y entonces vino a mi mente el acumular.
Estoy segura que a todos nos ha pasado… guardar esas cosas que nos traen recuerdos positivos: fotos, dibujos, libros, ropa, regalos, un sinfín de cosas que solo nos quitan espacio y guardan polvo en nuestros hogares. La realidad es que no todo lo que llega a nuestras manos, ha venido para quedarse.
Pero ¿por qué nos parece tan difícil tirar o regalar cosas? Bueno, existe un padecimiento psicológico llamado «síndrome de acumulación compulsiva». Los síntomas de quienes lo padecen es recoger y guardar objetos que NO necesitan hasta llenar su casa de cosas inútiles. Esto también se conoce como «disposofibia o el miedo de perder cosas».
Y exactamente hay que estar alerta de las razones por las cuales las personas no pueden deshacerse de las cosas:
- Tienen temor de necesitar los objetos más adelante.
- Tienen un apego emocional a las cosas como si fueran seres vivos.
- Son incapaces de tomar decisiones sobre lo que les sirve y lo que no.
- Les da miedo regalar las cosas pues las sienten como sus mayores tesoros.
Este trastorno generalmente comienza entre los veinte y los treinta años de edad cuando las personas experimentan el deseo de acumular objetos que ya no necesitan pero que no quieren tirar o regalar.
Es importante aprender a regalar todo lo que ya no usamos. Se vuelve una rotación de energía, es como sacar mucho para que entre más y cuando menos lo piensas, puedes tener cosas que necesitas y usas.
También es importante enseñar a nuestros hijos a no apegarse de lo material, a saber cuándo es un buen momento de regalar juguetes, ropa y libros que ya han leído y hacerlo por una razón particular.
Es bueno que cada que vamos a sacar cosas, los niños en casa sean quienes elijan qué quieren sacar y a quién se lo quieren dar. Para permitir que la energía fluya en nuestros hogares, a sacar lo que ya no necesitamos y regalarlo para hacer un bien, siempre con #ActitudPositiva